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Durante los 4.000 millones de años de existencia, la vida ha experimentado con todo tipo de interrelaciones entre organismos. Estas interrelaciones se ordenan en base a dos ejes: 1) El flujo trófico-energético, y 2) El control de la interrelación. En el caso del ser humano también se dan todas las modalidades de interrelación, En cuanto a las interrelaciones tróficas o bioeconómicas se establecen; según las circunstancias y el momento histórico: la Predación; la Ganadería; el Parasitismo; el Parasitoidismo; la Competencia Mediante Apropiación de los Recursos; la Competencia Mediante Eliminación Directa del Competidor; la Interferencia Secundaria o Lejana; la Colaboración Opcional; la Colaboración Perfecta; la Simbiosis Obligada y la Manutención. En cuanto a el control de la interrelación se distinguen cinco situaciones o mecanismos de “control del otro”, que enumeramos en orden del más primitivo al más avanzado o civilizado: MCdO-1 por la Acción Directa o Uso Real de la Fuerza. MCdO-2 por Engaño-Ventajismo o Manipulación-Desinformación. MCdO-3 por Comercio o Intercambio. MCdO-4 por Ideología o Formación. MCdO-5 por Legislación o Bloqueo de Legislación. Centrándonos en la situación actual y futura, y simplificando la explicación se pueden definir dos ideologías en función de la simetría en la interrelación: 1) El predatoventajismo: que es hegemónico y agrupa y practica todas interrelaciones asimétricas y, 2) El noindefensionismo que tiende a la simetrizaciónSimetrización de las interrelaciones. La gran pugna ideológica que deberá resolver la humanidad al inicio del siglo XXI será entre estos dos planteamientos Decistémicos o ideológicos. La situación global actual puede definirse como un parasismo predatoventajista impuesto aplicando de manera simultánea los cinco mecanismos MCdO. Esta concentración de poder es lo que define como lo que es y cómo funciona un totalitarismo. En situaciones de reducción drástica de recursos trófico-energéticos, los sistemas parasitarios solo tienen dos salidas: 1) Evolucionar a Parasitoidismo o, 2) Evolucionar hacia la simbiosis obligada. En el primer caso el sistema político y social resultante será un totalitarismo tecnoeconómico global excluyente. En el segundo caso el sistema político y social resultante será la Atomocracia Tecnorraciofuncional Local-Regional-Global Integradora. El resultado de la pugna dependerá de la utilización que se haga de los avances tecnológicos Localtelmáticos (Internet). En el caso del totalitarismo tecnoeconómico son las élites extractivas las que se apropian de estas tecnologías y las aplican al control social absoluto, con una drástica limitación de los derechos individuales. (Fijaros en lo que está sucediendo en China). En el caso de las Atomocracias Raciofuncionales son los ciudadanos los que legislando, no solo impiden el proceso de Hormigalización parasitoide, sino que utilizan esa tecnología para forzar a las élites extractivas a la simbiosis obligada (Ver lo que se está sucediendo tímidamente en Europa con la defensa del derecho a la privacidad). El parasitismo por parte de células de un mismo organismo se denomina cáncer. Si se considera que todos los seres humanos son miembros de la humanidad, quienes saltándose las mínimas normas de respeto por los otros se enriquecen de manera patológica y aberrante están actuando como tumores cancerosos. Tan solo 10 millones de personas están actuando como élites Tumorales Extractivas, Distróficas, Septicémicas y Parasitoides del Supraorganismo Civilización Humana. Unas tramas adictas o borrachas de poder en proceso de metástasis y control absoluto del sistema social, que no entienden el daño que están haciendo a la humanidad, ni el riesgo que corren ellas mismas cuando sean señaladas. El ser humano aplicará su inteligencia para acaba con todos los tipos de cánceres orgánicos de los individuos, pero también con todos los tumores sociales. Esto es lo que se denominan inevitables evolutivos. Procesos que tendrán lugar tarde o temprano, gusten o no gusten. Lo que en este momento es difícil de determinar es si este proceso de control y reeducación de los tumores sociales se producirá antes del ya imparable colapso bioclimático, o será precisamente el enorme sufrimiento de miles de millones de seres humanos lo que provocará ,y el que forzará el cambio desde un Parasitoidismo impuesto transitoriamente a una civilización simbiótica basada en la atomocracia y la raciofuncionalidad. El proceso que forzará a la colaboración simbiótica será el establecimiento de la atomocracia a nivel local-regional-global; el sistema político legislativo y de gobierno que desplazará a la democracia; cuando los ciudadanos occidentales se vean obligados a asumir, de manera definitiva, que las democracias son incapaces de enfrentar la resolución de los colapsos globosistémicos, bioclimáticos y económicos, y que son más parte del problema que de la solución; y que si no actúan los que sufrirán serán ellos y sus hijos. Expresado de manera coloquial, solo la plena colaboración de los “Ricos” con los “No Ricos” podrá aumentar la eficacia y eficiencia en la gestión de unos recursos limitados, permitiendo establecer un reparto lo suficientemente justo y racional, que permita contentar a todos y estabilizar y frenar la serie de colapsos político-económicos encadenados, que de otra manera solo conducirán al caos y al totalitarismo. En esta situación los únicos con la capacidad y poder suficiente para forzar al resto a la colaboración perfecta o simbiosis obligada son las mayorías mundiales de ciudadanos normales, reflexivos y razonables; unos 1.000 millones de ciudadanos, clases medias y medias altas, de países occidentales y emergentes. La Nueva Civilización Humana Local-Regional-Global Saltos Evolutivos Hacia la Nueva Civilización Humana Local-Regional-Global
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